Es posible aprender a “encantar” a las personas para dejar una impresión positiva y así mejorar tu networking.
El mundo se vuelve tuyo cuando eres capaz de dejar una impresión positiva y duradera en las personas que encuentras en tu camino. La buena noticia es que se puede aprender la habilidad de “encantar” a otros. A esta característica se le conoce como CARISMA.
Muchas personas experimentan problemas a la hora de hacer contactos porque sienten que no tienen la confianza necesaria para conocer personas nuevas. Bueno, ¿qué tal si tuvieras una herramienta – el carisma- que hiciera que todos te notaran al entrar en una habitación?
Es posible y estas 7 claves te ayudarán a tener tus niveles de carisma al máximo.
+Mantente alerta
Primero lo primero. Cuando hables con alguien debes permanecer alerta, es decir, completamente presente. Si es una conversación uno a uno, debes hacer sentir a la otra persona como el único individuo en la habitación.
Si estás en un grupo, haz que el orador se sienta importante y si eres tu quien tiene la palabra, pon atención a todas las personas cuando hables. Mira a cada asistente. Esto cambia totalmente el impacto que tienes al hablar ya que dejas una impresión duradera en las personas.
+Sé atractivo
Las personas carismáticas suelen estar menos estresadas y son más exitosas y atractivas. Cuando digo que son atractivas, no me refiero en el aspecto físico, sino a que se ven y actúan como las personas normales, pero son capaces de llamar la atención de otros.
Muchos líderes son calificados como carismáticos porque tienen una postura firme en lo que creen, aman aprender y gustan de influenciar e inspirar a otros. Son muy atractivos.
+Recuerda y repite
Una gran y sutil manera de elogiar a alguien que acabas de conocer es recordar su nombre y usarlo dentro de la conversación. Tu interlocutor te respetará por recordar su nombre porque lo harás sentir especial.
Un buen truco es presentarte primero y esperar a que la otra persona haga lo mismo. Una vez que te diga su identidad, mándale una orden a tu subconsciente pensando “Recuerda su nombre” y así lo tendrás fresco en la memoria ya que obligarás a tu mente a poner atención en la conversación.
Cuando sepas el nombre de una persona que acabas de conocer, repítelo varias veces en la conversación y otras tantas en tu cabeza.
+Domina tu OTRO lenguaje
Junto al carisma, otra gran arma es el lenguaje corporal. Está probado que la manera en cómo te mueves puede incrementar tu autoconfianza.
El lenguaje corporal es un idioma universal. Las personas inconscientemente leen tus movimientos y expresiones faciales cuando te les acercas, así que, si tienes una buena postura y te muestras feliz y positivo, dejarás en claro que tienes carisma.
¿Necesitas sentirte seguro antes de una junta o entrevista importante? Ve al baño y párate como superhéroe, con las manos en la cintura, viendo hacia el cielo con la barbilla hacia arriba y las piernas en posición de “A”. Siempre funciona.
La confianza es una parte fundamental del carisma. Las personas te admiraran por la seguridad que demuestras.
+Tus ojos lo dicen todo
Las personas pueden medir tu nivel de seguridad según tu capacidad de sostenerles la mirada. No se trata de que mires a otras personas sin parpadear, sino de observarlas con confianza. Si esto te causa temor, puedes empezar por mirar el punto que se encuentra en medio de los ojos, justo donde nace la nariz. Parecerá que los estás viendo a los ojos y disminuirás tus nervios.
+Deja de quejarte
Una buena manera de mostrar carisma es alejarte de cualquier conversación negativa. Aun cuando las personas no tengan la actitud más positiva, trata de iluminarlos un poco con una buena actitud. Así, cuando piensen en ti, te recordarán como una experiencia positiva.
+Palabras amables
Elogia a los demás genuinamente. Esto requiere práctica ya que la mayoría de las personas no presta atención a los detalles y pierde la oportunidad de encontrar características positivas en los otros. Es por eso, cuando aprecias alguna característica de alguien más, te destacas.
Las mujeres son mejores en esto, pero imagina recibir un elogio inesperado de un hombre. Seguro lo recordarías.
Y no se te olvide ser un poco más expresivo cuando hablas, con tu lenguaje corporal y tus expresiones faciales. Comparte historias, ya que son más fácilmente recordadas y se destacan de las conversaciones aburridas del día a día.
FUENTE: SOY ENTREPRENEUR