Las personas somos criaturas de hábitos, buenos o malos, todos tenemos modos y maneras de realizar nuestras distintas actividades.
Los buenos hábitos reflejan un lado positivo, que nos permite ser mejores personas, más eficientes, confiables y con mayor capacidad para estar preparados.
Levantarse temprano, ser productivo y concentrado son algunos de los buenos hábitos que nos ayudan como emprendedores para continuar día con día y buscar lo mejor para nuestro negocio.
Pero muchas veces, los malos hábitos son los que impiden que podamos cumplir con nuestros objetivos o simplemente aplazarlos, si estás cometiendo uno de los siguientes 5 malos hábitos, tenemos una noticia, el éxito tardará más de lo que te imaginas en llegar:
1.- No planificar bien
El camino entre tener un sueño y una meta, se encuentra en la planificación. Nunca existirá el éxito en la vida si nadie lo planifica, no tiene que ser perfecto. El mundo real no recompensa a los perfeccionistas. Hacer planes específicos y con plazos determinados nos acercará a donde queremos llegar.
2.- El miedo
Uno de los peores enemigos del emprendedor, el mundo es de los arriesgados. Si no aprovechas tus oportunidades, ¿Cómo sabrás que puedes hacerlo?
Enfrentar tus miedos ahora mismo, desde lo que tienes que hacer para iniciar el proyecto que quieres o hacer crecer tu negocio, solicitar ese préstamo que necesitas para crecer. Todo comienza con un paso a la vez.
3.- Renunciar
El verdadero fracaso es rendirse. Lo más difícil puede ser iniciar, mantenerse requiere paciencia, te volverás loco, pero si tus metas son claras, renunciar no será una opción.
4.- Incredibilidad
Si no tienes una sola razón para creer en ti, nadie más tendrá una razón para creer en tu proyecto. Hacer crecer tu negocio sólo será posible si tú crees en él, porque así ayudarás a otras personas a creer en tu sueño, a que puedan dirigirse a un mismo lugar.
Si tú no puedes ver un resultado exitoso, no exijas a los demás que te ayuden a llegar ahí, el éxito depende de la decisión de intentar saber que superarás tus fracasos y te levantaras por encima de ellos.
5.- Las excusas
Crecer tu negocio, ampliar tu lugar de trabajo, abrir una nueva sucursal y posponerlo por cualquier excusa. “No tengo el capital”, “no estoy recibiendo la suficiente utilidad”, etc. Las excusas son resultado del miedo y la comodidad de mantenerse en el mismo lugar. Crecer requiere sacrificios, pero vale la pena intentarlo.
Ya lo saben emprendedores, su momento de crecer es ahora, eliminen estos malos hábitos para fijar sus metas y alcanzarlas.